No solo por el dinero, sino también por el ecosistema y nuestro compromiso con el planeta. Por ello, hacer un uso más responsable y eficiente de la energía nos ayudará a contribuir a una mayor sostenibilidad, imprescindible hoy en día. Además, del aumento del precio de la luz actualmente en el mercado.
Aunque parezca una obviedad, en ocasiones el motivo principal por el que gastamos más en electricidad es que el precio de la luz que contratamos no se adapta a nuestra situación de consumo o no ofrece una ventaja clara en cuanto a precio o condiciones esperadas. Sin mencionar la posibilidad de agregar una potencia óptica innecesariamente alta a su factura general.
Aislamiento térmico
Aplica técnicas de aislamiento térmico para viviendas: sin obra alguna, se puede aplicar una capa de pintura térmica para evitar la humedad, instalar paneles aislantes y revestimientos en lugares específicos de la vivienda. Además de ser decorativas, eliminan los puentes térmicos y por tanto evitan la fuga de energía.
Instalar sistemas de calefacción eficientes
En las llamadas casas pasivas, con sistemas de calefacción eficientes, los costos anuales de calefacción se reducen significativamente. La apuesta por los sistemas de calefacción basados en energías limpias y renovables fomenta la eficiencia energética. Sustituir las calderas tradicionales por una de condensación o bomba de calor reducirá los gases contaminantes.
Cortinas para protegerse del frío y el calor
Las cortinas no solo son buenas para el otoño o el invierno, son esenciales durante todo el año. Y no solo son ideales desde el punto de vista decorativo, también sirven para regular la incidencia de la luz, aislar del frío exterior y aportar privacidad y calidez a las estancias. La combinación de dos cortinas de luz y un tono más oscuro logra las tres cosas, lo cual es ideal para una época como el otoño, cuando la luz y la temperatura varían mucho incluso en el mismo día. Recuerda que si el aire frío intenta colarse por un rincón de la ventana, las cortinas te ayudarán a que no vaya más allá.
Opta por iluminación de baja densidad e iluminación natural
La iluminación de las diferentes estancias de la casa se puede conseguir mediante tecnología LED. Las lámparas LED son una inversión que conduce al ahorro de energía. Aunque no hay mejor forma de reducir el importe de la factura mensual de electricidad que simplemente aprovechar al máximo la luz solar, es mejor tener suficiente luz natural durante el día porque no solo mejora la salud de los usuarios, sino que no genera prácticamente ningún consumo de energía.
Cuanto más podamos utilizar la luz natural, menos gastaremos en iluminación artificial. Esto lo podemos conseguir incorporando grandes ventanales que dejan pasar la luz natural.
Sustitución de las ventanas
Si además estas ventanas son del material más aislante posible, necesitaremos menos energía para climatizar nuestra casa. Las ventanas de doble o incluso triple acristalamiento son la mejor manera de conseguir un buen aislamiento y conseguir la temperatura perfecta sin desperdiciarla. Por lo tanto, le recomendamos que tenga esto en cuenta si planea reemplazar sus ventanas. Ahorrará en tu factura y ganas en bienestar.
Las alfombras
Nos encantan las alfombras, sobre todo ahora que llega el frío, porque aportan calidez al suelo de nuestro hogar. Las alfombras más recomendadas son las de pelo largo y de tejidos como lana o terciopelo.